En Bolivia el Covid-19 tuvo un gran impactó en muchas áreas, en la salud, en la familia, en la educación, en la interrelación personal y social, pero en especial tuvo el mayor impacto en el área económica.
Fueron muchas familias campesinas, indígenas y citadinas que se quedaron sin fuentes laborales y por lo tanto sin ingresos económicos que sustentaran la sobrevivencia cotidiana. Lo que impactó mucho en el acceso a la alimentación y a la exposición al Covid-19.
Todas las personas sufrieron afectaciones de una o de otra forma, se enfermaron del Covid, muerte de familiares o personas cercanas, despido de fuentes laborales, inaccesibilidad a la educación por elevadas tarifas de conectividad del internet, escasez y carencia de productos alimenticios, subida desmesurada de precios de alimentos de primera necesidad, desabastecimiento y carencia de medicamentos e insumos de bioseguridad... se elevaron los casos de violencia intrafamiliar y violencia hacia la mujer y niñas y niños.
Las personas más afectadas fueron las de escasos recursos, familias con numerosos miembros y ubicadas en áreas alejadas de los centros de salud, lo que impedía una pronta ayuda por parte del personal médico especializado.